La comunicación es una de las herramientas más potentes hoy en día y de ahí la necesidad de saber cómo gestionarla. Las empresas, y en nuestro sector en específico las franquicias, por muy pequeñas que sean tienen la necesidad de comunicar a sus diferentes públicos que es lo que hacen.
Comunicar parece una tarea fácil, sin embargo cada público requiere de información diferente, con un mensaje adaptado al lenguaje de cada uno y unos medios adecuados que si son bien elegidos nos ayudará a que el mensaje llegue correctamente desde el emisor al receptor final.
Para poder asegurar la buena comunicación tenemos que hacer analizar tres aspectos; “Que vamos a comunicar”, “A quién nos vamos a dirigir” y “Cómo lo vamos a transmitir”.
Que vamos a comunicar
El proceso de comunicación empresarial comienza por identificar que información vamos a comunicar. La identificación del “Que” viene muchas veces dada por la propia trayectoria empresarial que va dando lugar a novedades. Podemos comunicar desde el lanzamiento de un nuevo servicio o producto, la apertura de un nuevo establecimiento, la celebración de un evento o los resultados de ventas. Hoy en día prácticamente es comunicable todo pero no a todos.
Una vez identificado lo que vamos a comunicar tenemos que buscar un mensaje a trasmitir y habrá que adaptarlo al público al que nos vayamos a dirigir. Esto nos lleva al segundo punto de este texto, el quien.
A quien nos vamos a dirigir
Partiendo de la base que todo se puede comunicar si sabemos cómo, pasamos a la segunda fase que sería identificar a quien de nuestros públicos nos vamos a dirigir y con qué mensaje vamos a llegar a ellos.
Muchas veces pensamos que nuestro único público son los clientes y descuidamos de otros grupos a los que les interesa también nuestra actividad. Estos grupos es lo que se suele llamar los shareholders o grupos de interés de la empresa. Podemos distinguir entre los grupos internos entre los que se encuentran los empleados, franquiciados, directivos o propietarios y los grupos externos como los clientes, sociedad, o los accionistas.
La importancia de este paso consiste en identificar si el “Que” puede ir dirigido a todos los públicos. Por ejemplo en el caso de una apertura de una franquicia tendremos que analizar si la información sobre la nueva apertura le puede interesar a cada uno de nuestros grupos todos nuestros grupos.
Como lo vamos a trasmitir
Tenemos ya identificado nuestro mensaje y nuestro público. El siguiente paso consiste en la elección de los medios que vamos a utilizar para asegurar que ese mensaje llegue al público que hemos seleccionado.
Una de las clasificaciones habituales utilizada en marketing para distinguir los medios de comunicación utilizados en las empresas son: los medios pagados “Paid Media”, medios propios “Owned Media” y medios ganados “Earned Media”.
- Los medios pagados como su nombre indica son en los que invertimos como la publicidad online y offline. Estos medios suelen ser los utilizados para dirigir la comunicación a nuestros públicos “extranjeros” es decir sociedad, medios de comunicación o la comunicación con los clientes y con la sociedad en general. A través de ellos informaremos acerca de novedades de productos o servicios, promociones eventuales o eventos.
- Los medios propios son nuestros propios medios, ya sea nuestra página web, perfiles de redes sociales, intranet o el propio punto de venta. A través de nuestros medios podemos comunicarnos a casi todos nuestros receptores pero es importante distinguir quienes son los que utilizan estos medios y con qué mensaje podemos llegar a ellos.
- Por último los medios ganados son aquellos que por nuestra actividad hemos conseguido que se realicen comunicaciones de nosotros. Entre estos se encuentran los foros, blogs o las conversaciones de individuos en las diferentes redes sociales. Estos medios no los controlamos directamente por lo tanto la información que se vaya a transmitir acerca de nosotros hay que saber gestionarla.
Como conclusión, es necesario diseñar una estrategia de comunicación, analizando cada uno de los aspectos ya nombrados y combinando los diversos medios con los que contamos para que cada mensaje llegue en el momento idóneo al público correcto sin que ninguna información se quede sin destinatario.