Mobalpa, una de las compañías líderes en el diseño y fabricación de cocinas y en la distribución a medida, es un “partner” ideal en el camino del emprendimiento. Dan fe de ello Guillemette Schortgen, Country Manager de Mobalpa en España, Lourdes Ros, franquiciada de Mobalpa en Marbella y Pilar Hernández, Manager de ventas en la franquicia de Príncipe de Vergara en Madrid. Aspiración, ganas de emprender, formación y pasión son las claves de un desarrollo profesional exitoso junto a uno de los líderes europeos en el sector.
Perfil de espíritu emprendedor
Schortgen admite que “no tuvo ninguna duda en aceptar el reto de implantar, desarrollar y gestionar la enseña en España” y añade que “es un orgullo que Mobalpa me haya elegido”. La Country Manager de Mobalpa lleva más de 30 años dedicada al mundo del retail y de la franquicia en España. Ella misma ha sido empresaria y sabe lo que es tener su propio negocio para poder acompañar y entender a los empresarios franquiciado. Se define como “una mujer de estrategia” que sabe gestionar bien los negocios y que tiene “don de gente”. “La clave del éxito es una buena estrategia, marcar objetivos alcanzables, estar en contacto permanente con el terreno y vivir tu trabajo con pasión” destaca Schortgen, lo que le ha llevado en ser nombrada por el medio Le Petit Journal en su lista de “Mujeres en la cima de la presencia francesa en España”.
Reconoce que “en un sector donde la figura de emprendedor, vendedor de cocinas, diseñador de proyectos es masculina, es el equipo de RRHH de Mobalpa ha dado un giro a esta tendencia muy anclada en la tradición del mundo de la cocina”.
Las franquiciadas de Mobalpa avalan a la marca
Ros en Marbella, por su parte, destaca que la compañía valora “la capacidad y las cualidades de la persona, fundamental para conseguir la igualdad real en el entorno laboral”.
Hernández, que ya contaba con una empresa de construcción y reformas, comenzó a interesarse en el diseño de cocinas dada la importancia que esta estaba adquiriendo dentro del hogar. “Se ha convertido en el alma de la casa y eso, unido a la gran pasión que me produce el diseño de interiores, derivó en el interés del mundo de las cocinas con Mobalpa” y añade que “la especialización en los productos de la marca le ha permitido elaborar proyectos a clientes, su verdadera pasión”.
Mobalpa supuso un paso profesional más en la vida de la franquiciada de Marbella. Lourdes Ros destaca que “formar parte del ambicioso proyecto de expansión y ser una de las primeras tiendas de Mobalpa en España era una oportunidad única que no quisimos dejar escapar”. Aplaude, además, “la gran familia que supone Mobalpa y la calidad humana excepcional que ha encontrado en la compañía”.
Objetivos profesionales en el sector
La aspiración es un factor muy importante en el equipo que conforma Mobalpa. Por ello, en un futuro donde la venta de cocinas y las soluciones a medida están en alza, pensar en grande tiene resultados positivos. Pilar Hernández se plantea un reto desde el punto de vista del franquiciador: el de consolidar la tienda y adquirir un nivel de ventas sostenible como está siendo hasta ahora.
Schortgen destaca su propósito de “hacer las cosas bien para que las 7 tiendas actuales superen sus objetivos de venta, para que los franquiciados sean verdaderos embajadores de la marca y trasmitan a sus clientes la calidad de productos y de servicios que tenemos en Mobalpa”. En definitiva, Schortgen destaca el interés de Mobalpa “en que las franquicias tengan éxito y buenos beneficios y que la compañía se vuelva un referente en el mundo de las cocinas y del mueble de hogar a medida en el mercado español”.
