Fernando Ruiz, Socio Director de Proyectos de mundoFranquicia
En los últimos años, han sido muchos los conceptos novedosos y con grandes expectativas que sin embargo no llegaron a conseguir el desarrollo deseado
Son muchas las personas que se sienten atraídas por conceptos de negocios innovadores que aparecen en el mercado y que en poco tiempo inundan las principales calles de nuestras ciudades, viendo estas como una opción para desarrollarse profesionalmente. ¿Son estos negocios modelos recomendables?
En los últimos años, han sido muchos los conceptos novedosos y con grandes expectativas que sin embargo no llegaron a conseguir el desarrollo deseado, algunos de estos ejemplos son las yogurterías, los cigarrillos electrónicos y las lavanderías entre otros muchos.
El éxito inicial de estos negocios se debe en muchas ocasiones a algunos factores como baja inversión, una imagen y una marca atractiva, un producto o servicio innovador, un crecimiento fuerte…; siendo estos responsables de que muchos emprendedores quieran apostar por estas marcas.
Esto da como resultado que muchas personas se puedan dejar llevar por el éxito inicial que proyectan estos modelos, sin pararse a realizar un estudio pormenorizado, tanto del negocio como del mercado de implantación para minimizar el riesgo de fracaso.
Dentro de los modelos mencionados anteriormente, uno de los ejemplos más llamativos fue en el año 2013 el de cigarrillos electrónicos, el cual parecía que contaba con todos los factores para ser el negocio del siglo, y sin embargo en poco más de un año, pasó de tener más de 3.000 puntos de venta a cerrarse más del 95% de estos.
Algunos de los principales motivos que propiciaron la corta trayectoria de este concepto fueron la falta de normativa, el vacío legal existente en ese momento, la entrada de productos procedentes de mercados asiáticos y una saturación del mercado, entre otros.
Por todo ello, aconsejamos a todo aquel que quiera emprender en franquicias tenga en cuenta por un lado, que el mercado donde quiera desarrollarse sea estable, es decir que el interés del público por el servicio o producto sea duradero y que no esté basado en una novedad de consumo; y por otro lado, que sea amplio, es decir que la zona de exclusividad asignada incluya un número suficiente de clientes potenciales, con el fin de que permita amortizar la inversión acometida y rentabilizar el negocio.
La compra de una franquicia o la elección de un negocio tienen que ser tomada de manera racional y no dejarse llevar por modas efímeras o negocios con corto recorrido. Actualmente contamos con numerosas fuentes de información como puede ser internet, portales de franquicias, seminarios, ferias…
Siempre aconsejamos contar con los servicios de una consultora especializada ya que nos puede aportar información muy valiosa para la elección del negocio, y aunque suponga un coste inicial, este coste es mínimo si lo comparamos con el desembolso total y el riesgo que conlleva la puesta en marcha de cualquier negocio.