“Vosotros jóvenes, sois los responsables de vuestro futuro” San Juan Bosco, ya decía esto en el Siglo XIX, reflejando así la responsabilidad con la que cargan los jóvenes. Ahora, en pleno siglo XXI sólo han cambiado las circunstancias.
Los jóvenes, en un mundo cada vez más cambiante, se sitúan como punta de lanza de la innovación, la tecnología y el desarrollo. Y han encontrado en la franquicia la oportunidad de explotar su entusiasmo, su iniciativa y sus ganas de emprender.
Para ponernos en situación, según datos de la EPA, la tasa de paro para menores de 25 años se sitúa en el 35% en el primer trimestre de 2019, sólo superado por los menores de 20 años, lo que muestra cómo los jóvenes son los que más problemas tienen en la actualidad a la hora de relacionarse con el mercado laboral. Esto se debe a diferentes razones, entre las que resaltan la falta de oportunidades en el mercado laboral, la temporalidad de los contratos y el bajo coste de despido sobre estos.
En lo relativo a la franquicia, paralelamente, se está produciendo un aumento de enseñas en España. Según datos de la AEF (Asociación Española de Franquiciadores), la franquicia española, en 2019, suma su quinto año consecutivo de crecimiento en todas sus variables: número de redes, de establecimientos, de empleos generados y de facturación. Desde 2001 han aumentado el número de enseñas en más de un 100%, de 646 franquicias hasta las 1.376 con las que se cerró el 2018.
La relación que sacamos de estas dos variables es que los jóvenes se están decantando por el emprendimiento y la inversión en diferentes iniciativas laborales, entre las que claramente destacan las franquicias.
Los jóvenes no cuentan con experiencia laboral, ni conocimientos sobre la gestión de un negocio, sin embargo, las facilidades que proponen las enseñas a la hora de franquiciar son propicias para este público objetivo. La franquicia facilita un Know How o saber hacer, por lo que otorga una formación básica para el buen desarrollo del negocio. Con ello, las dificultades que supone iniciar un negocio son solventadas desde el principio al decidirte por cualquier enseña, de hecho, es por ello por lo que la franquicia dispone de tanto éxito; la marca reconocida en el mercado, la formación transmitida y la menor probabilidad de fracaso debido al apoyo inicial de la central franquiciadora.
