Esta plataforma digital comercializa elementos de decoración exclusivos creados por diseñadores artesanales y elaborados bajo demanda por makers mediante tecnología 4.0
El fundador y CEO de la compañía, Vicente Cánovas, comenzó a desarrollar el proyecto en 2017 con el objetivo de crear una fábrica global y digitalizada que conectase el talento de los diseñadores con los fabricantes y a éstos con los compradores, garantizando así la protección y remuneración del talento creativo de los artistas.
En esta línea, Faberin pretende acabar con la gran cantidad de talento creativo que queda olvidado en los porfolios de diseños que no llegan a materializarse. Como los fabricantes locales, artesanos, makers y pequeños talleres no tienen acceso a diseños de calidad, no encuentran la forma de vender productos directamente a clientes sin intermediarios. Esto se suma al hecho de que los clientes tienen difícil acceso a productos de diseño fabricados por artesanos, los cuales solo los encuentran en tiendas de lujo.
Por ese motivo, esta startup ofrece un catálogo de productos únicos, personalizables, de edición limitada y fabricados de forma original bajo demanda. Por una parte, los diseñadores ingresan royalties por sus diseños, manteniendo la autoría y los derechos de propiedad industrial. En paralelo, los fabricantes acceden a diseños exclusivos, alcanzando directamente a los clientes.
Faberin ya ha definido los canales de entrada de diseñadores y makers, triplicando el pasado mes de abril el número de registros con respecto a los meses anteriores. Para ello, se han centrado el Canal Horeca, poniendo el foco en la restauración, y en los prescriptores, interioristas, decoradores y arquitectos que valoren un producto exclusivo y original. En consonancia con esta estrategia, la empresa planea validar el modelo en España para escalar en el resto de Europa y en Estados Unidos.