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La franquicia ha alcanzado su objetivo de reforzar su presencia en la Comunidad de Madrid, llevando a cabo una importante mejora en el modelo de negocio que ha supuesto un aumento de la calidad gastronómica y la rapidez del servicio
La cadena de restaurantes y cervecerías BaRRa de Pintxos cerró el pasado año 2018 en positivo, alcanzando su objetivo de reforzar su presencia en la Comunidad de Madrid.
Para la organización, 2019 les brinda una gran oportunidad de consolidación de todo lo puesto en marcha durante el pasado ejercicio, con un ambicioso plan de expansión centrado en la apertura de ocho nuevos locales, con ubicaciones ya establecidas y varios de ellos con procesos de negociación en curso.
Durante el último año, BaRRa de Pintxos ha sentado las bases de su proyecto de expansión llevando a cabo una notable trasformación de la empresa, configurando un nuevo equipo directivo que ha liderado un profundo cambio en su gestión.
Su estrategia empresarial se centra, además de en una mejora en los procesos de gestión, en un nuevo software de compras y control de stock, así como del punto de venta, nuevos proveedores y una mayor estandarización para facilitar la operativa de las cocinas dotándolas de un nuevo equipamiento con el que ganar agilidad en el servicio. Lo que le ha permitido gestionar mejor los tiempos de producción y, por consiguiente, también el servicio al cliente.
BaRRa de Pintxos ha mantenido los precios ofreciendo la mejor calidad gastronómica, pero más rápido que nunca. Sin abandonar una potenciación de la entrega a domicilio a través de las empresas Glovo y Deliveroo, que llegaron a suponer en algunos de sus locales, hasta un 5% de las ventas totales.
En 2018 la empresa inauguró oficinas centrales. Además, cuenta con una nueva agencia de marketing y publicidad a través de la cual desea reforzar la imagen de marca entre sus actuales clientes y público objetivo.
Todos los cambios implementados han supuesto que los locales de la franquicia hayan cerrado el año en positivo con respecto al año 2017, a pesar de haber sido un año difícil económicamente, añadido a una bajada en el porcentaje de consumo en general.