La tendencia era al alza. Se experimentaba la mayor subida desde junio de 2016 y, respecto al mismo mes del año pasado, el comercio en febrero creció el 5,5%. Todo esto, antes de la irrupción del coronavirus. Los datos eran buenos.
Los datos hechos públicos este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) hablaban, además, de un 0,7% en el incremento del empleo y 70 meses sumando en positivo en ese vector.
Las ventas minoristas subieron en todas las autonomías, encabezadas por Madrid, con un incremento del 7,3 %; Comunidad Valenciana, con un avance del 6,7 %; y Cantabria, con un aumento del 6,6 %. La subida menos abultada se registró en Canarias y Asturias, en ambos casos del 2,7 %.
Por tipo de producto, la comercialización de alimentación se incrementó el 5,5 %; la de equipo personal, el 3,6 %; la de equipamiento para el hogar, el 5,8 %, y la de otros bienes, el 6,2 %.
En las grandes cadenas, el negocio se disparó el 12 % y en las grandes superficies el 7,3 %, mientras que en las pequeñas cadenas el incremento fue del 1,1 % y en el pequeño comercio, del 2,2 %.
La contratación aumentó en las tiendas unilocalizadas (0,7 %) y en las grandes cadenas (2,5 %), en tanto que en las pequeñas cadenas bajó el 1,2 % y en las grandes superficies se contrajo el 0,7 %. Los mayores incrementos en contratación se produjeron en la Comunidad Valenciana (2 %), La Rioja (1,2 %), Aragón (1,2 %) y Galicia (1 %) y sólo descendió en Asturias, un 0,7%.